2.- Vida: ¿es inevitable o un simple acontecimiento fortuito?

AILA AVILA JULIA TERESA

Vida: ¿es inevitable o un simple acontecimiento fortuito?

Conforme avanza nuestro siglo, el descubrimiento de planetas nuevos y semejantes a la tierra cada vez es más frecuente, que se cree que la galaxia está inundada de planetas habitables. Sin embargo el simple hecho de pensar en la posibilidad de la vida, en otros planetas, crea para los científicos y para la población en general cierta incertidumbre y paradoja.

Sabemos con exactitud que el universo es un lugar misterioso y grande y que la tierra surgió en la tierra solamente una vez, en lo que concierne pero no existen conclusiones concretas para generalizar el concepto de vida. Pongamos un ejemplo: Sí tomáramos el ingrediente vital de la materia que es la energía, nos remonta a que esta cualidad es tanto de la tierra como del universo, pero esta energía no evoluciona necesariamente hacia formas complejas. Los seres vivos para cumplir sus funciones vitales y a nivel ecosistema consumen una vasta cantidad de energía para después procesarla, descomponerla y romperla por medio del metabolismo y finalmente obtener las famosas moléculas de ATP. 

Reconstruyendo el pasado una pista de cómo conseguía la primera vida su energía, viene de los mecanismos de recolección de energía descubierta en todas las formas de vidas estudiadas. En el caso de las enzimas que alimentaron las primeras formas de vida, necesitaron en mayor cantidad energía, para poder evolucionar y lo mismo ocurrió con las células y con el universo, pero esto se debió a los mecanismos, estructuras y funciones tan simples e ineficientes para la producción de ATP, en otras palabra simplemente la viada antigua estaba en estado de adaptación y evolución en la tierra.

La aportación de Mitchell sugirió que las células son propulsadas por un campo de fuerza, y denomino a la fuerza conductora eléctrica como “fuerza protón- motriz” esta idea es con referencia a las estructuras nanoscópicas que se cree que debieron ser el resultado de la selección natural prolongada y de la complejidad de la vida en ese tiempo. La fuerza protón motriz natural ha llevado a la formación de moléculas orgánicas y un ejemplo es el agua y olivino, estos se encuentran entre las sustancias más abundantes del universo lo cual lo asocia con el hecho de que en muchas atmosferas planetarias del sistema solar son ricas en dióxido de carbono.

Se sabe que a partir de una célula simple se dio origen a organismos mucho más complejos a lo largo de cuatro mil millones de años de evolución una clara evidencia es la evolución de las eucariotas, adquiriendo mitocondrias estas dentro de las células competían por replicarse y sin perder su capacidad para generar energía y así sucesivamente evolucionaron para transformarse en pequeños generadores de energía que contiene la membrana necesaria para producir ATP y el genoma necesario para controlar el potencial de la membrana; Concluyendo que esta explicación se reduce a que la tierra, animales, plantas, hongos son eucariotas, y que las mitocondrias no recetaban la complejidad, sino que la permitieron que todos ellos evolucionaron de un ancestro en común.

El surgimiento de la complejidad en y de la vida puede girar en torno a la perspectiva de ver que la vida debido a su complejidad lo convierte en un evento raro y aleatorio, porque supone puede suceder en cualquier otro lugar y dimensión del universo.